domingo, 21 de diciembre de 2008

Cuando al arte lo llaman negocio.

Tenía pensado subir una nueva entrada hablando sobre el rock and roll de carretera, con descargas de recopilatorios compiladas por mi en las que he seleccionado los mejores temas y asi difundir el espiritu del rock and roll, de la road movie y del polvo del asfalto a vosotros, pero me parece que lo reservaré para la próxima entrada. ¿Por qué? sencillo, en este país de LADRONES, los MAFIOSOS de la SGAE que se dedican a estropear la cultura y a parserguirnos a los internatuas como si fueramos DELINCUENTES con las ayudas de los gobiernos, me da igual PP que PSOE, los dos son la misma perra con distinto collar. Estos personajes multan a una asociación benéfica, se meten en bodas a ver que música suena, cobran un cannon, que habria que llamarlo IMPUESTO REVOLUCIONARIO pues te mandan una carta o se presenta uno de sus secuaces en un local AMENAZANDO de que o pagas o te cortan el negocio, son tan SINVERGÜENZAS que han hecho cerrar el blog CARRETERA SIN FIN que ofrecía descargas SIN ÁNIMO DE LUCRO de discos descatalogados y muy dificiles de encontrar, haciendonos un gran favor a los amantes de la música.

Asi que seguidamente, voy a subir una carta que me ha llegado al correo, no se de quien es pero es todo cierto, se de lo que habla pues yo me dedico a llevar a un músico, se la miseria que paga la SGAE, se lo dificil que es que te oigan y puedas vivir de esto y el trabajo que día a día se hace en la carretera tocando en salas de medio aforo. Tras esto, aqui va la carta:

"Sé que esto no va a cambiar nada.

Que posiblemente este escrito no llegará nunca a sus oídos, señores directivos de la SGAE, y que uds. continuarán ufanos y convencidos que la política que llevan es correcta, sin importarles que otra voz se alce contra ustedes. Total, les de igual verdad?Pues déjenme decirles una cosa: Soy músico. Soy socio de la SGAE. Y cada día que pasa me avergüenza más recibir mis míseros 20€ anuales el 31 de diciembre, a cambio del flaco favor que le están haciendo a la cultura de nuestro país.

Me avergüenza que criminalicen el p2p cuando yo he sido el primero en poner canciones de mi grupo en el e-mule y en descarga directa para que la gente las conozca. Me abochorna que tengan que perseguir a asociaciones sin ánimo de lucro, a parejas de novios que se acaban de casar y a tiendas de zapatos por poner música registrada.Me alucina que tengan que poner un canon en cd's, dvd's, discos duros y cualquier cosa que pueda almacenar información, con el argumento que "quizás se use" para almacenar material con derechos de autor. Me indigna que, aduciendo que todo esto lo hacen por el bien de nosotros, los músicos, en realidad lo que hacen es quitarnos lo poco que tenemos y quedárselo para uds.

Si autoproducimos algo sin distribución (lo típico, vendes los cd's en tus conciertos) les tenemos que dar 50 céntimos por cd, un dinero que nunca veremos. Si hacemos un directo, ahí tenemos al señor representante, exigiéndonos, con prisas, y antes de desmontar siquiera, que le digamos qué temas hemos tocado para luego registrarlo.

Y saben qué? Que a la mayoría de músicos de este país, nos la suda lo que hagan con los derechos de autor. Los músicos de verdad vivimos de currar mucho, cobrar poco, estar todo el día fuera de casa, ensayando, buscando bolos, haciéndolos, y para nosotros no hay mayor satisfacción que ver que nuestra música se escucha en algún sitio.Y si nos hacemos socios de la SGAE es para que nos devuelvan algo de lo mucho que nos quitan, e intentar hacerles menos ricos a ustedes de lo que ya son.

Lo que ustedes pretenden es perpetuar un negocio que ya no tiene sentido. Hacen como todas las grandes multinacionales del sector. No miran más allá de sus narices, ni velan por el futuro de la música.Sólo piensan en ingresar cada año más que el anterior.Pero saben una cosa? Quien tensa demasiado la cuerda, acaba rompiéndola. La indignación que producen sus acciones, en escalada constante, está poniendo cada vez más sectores de la sociedad en su contra. Tarde o temprano, esto se volverá contra ustedes.

Y espero que ese día, tengan lo que de verdad se merecen.

Un saludo"

Creo que está todo dicho con esta carta, asi que ahora en honor al blog CARRETERA SIN FIN en la próxima entrada pondré a vuestra disposición tres recopilatorios para aquellos que de verdad aman el Rock and Roll. Y si se quitan el parche estos piratas de la SGAE que me cierren también el blog.

Sonando siempre...

Charly.-


domingo, 23 de noviembre de 2008

“Shhhh!!! POR FAVOR!!!”


Mientras lees este texto yo he huido de la escena del crimen, soy un escapista de las cuatro paredes y mis pies son el caucho de los neumáticos. Camino del sur, oyendo a la granadina Zahara y revisando mi agenda y mi cabeza, repaso con calma y nerviosismo a la vez mis prioridades humanas.

¿Qué hay de malo en hablar? Nada, aunque hables de tonterías, no hay nada de malo. ¿Es perjudicial ir a un concierto? Para nada, salvo que Melendi amenace con cantar, no tiene porque ser malo oír música en directo. Entonces, ¿ir a un concierto y hablar es compatible? Claro, alguien tendrá que criticar que el batería no sigue el ritmo pero por el contrario puede hablar con su acompañante de cómo le gusta lo que oye y que se comprará el disco. Pero… ¿Si pagas por ver un concierto y hablas y no dejas oír a los demás asistentes ni al músico tocar?... entonces, amigo mío, eres idiota.

Pongámonos en situación, una sala de aforo mediano, cincuenta personas asisten al concierto de un músico con su banda en acústico y cuatro modernitos, cubata en mano, hablando a viva voz. Miradas hacia quienes hablan, parece que sus flequillos no les dejan ver más allá del hielo derretido de su vaso y no se dan cuenta de que molestan. El concierto continúa ya casi por la mitad, entre acordes de guitarra y la voz del cantante podemos oír cuatro tonos de ser humano parcialmente desafinados e histriónicos. Mucha gente molesta les chista y les piden por favor que se callen. Pero nada, el momento en silencio en el que se habían mantenido había sido porque dos fueron al cuarto de baño, otro bebía y el restante se fue a hablar con su móvil (seguramente no tendría cobertura, sino si que estaría hablando en el mismo sitio). No aplauden ni un tema, molestan y dado su estado de embriagadez ya no solo molestan con la voz, sino que los empujones se suman a su festival de civismo.

Lo siento, esta noche no tocaban Franz Ferdinand.

El músico, desde el escenario se fija en estos cuatro, pero el tiene que ganarse el pan y continúa tocando, no sin poner cara de descontento hacia esos cuatro simpáticos personajes. Ya situados en escena pensaréis: “pues eso se ve en muchos conciertos”. Efectivamente, se ve, y te da igual el que sea, se ve y es algo común a veces hasta molesto, sobre todo si te tocan cerca. En los conciertos gratuitos es donde más se ven pero en los que pagas por ver el bolo se siguen sintiendo a algunos de estos personajillos, que encima de pagar una cierta suma de dinero, ni oyen ni ven nada y ni dejan, vamos, como el perro del hortelano, que ni come ni deja comer. ¿Tan falto eres que encima de pagar vas a hacer el gamba toda la noche, compañero?

En fin, la educación hace más falta que el dinero en estos tiempos y el respeto es algo que no se encuentra fácilmente. También es cierto que este tipo de gente en un concierto es como los fideos en la sopa, pero sin pasarnos. No voy a catalogar a los fans ni fauna en los conciertos, me he encontrado de todo y espero seguir encontrándome más.

He tenido largas esperas antes de un concierto y ahí ves muy fans (talifans) que han recorrido toda la geografía haciendo la gira, se saben todo, el hotel donde se alojan, ropa, consiguen cualquier cosa y hasta tienen cierto contacto con alguien cercano al grupo o banda, pero no aceptarán críticas, si lo haces y te fulminan con la mirada luego no te quejes. Hay tipos que van tranquilamente a verlo si pueden en primera fila, sino pues lo verán desde donde sea poniéndose de puntillas, chavalitas que presumen de sus escarceos con algún miembro de la banda (vulgarmente conocidas como grupis) incluso algún novio orgulloso de tal proeza. Llevando unos cuernos ilustres y tan campante. Verídico.

Es tan amplia la fauna “concierteril” que es imposible ver a simple vista quienes son unos y otros, hay que conocer a las personas. Pero lamentablemente ir a un concierto de alguien que arrastre fans como si de una secta se tratara es posible que te encuentres talifans, grupis, enterados y en menor medida amantes de la música.

Aún conservo en la memoria y espero que por mucho tiempo, el concierto de Neil Young en Rock in Río, lógicamente había de todo pues mas que un festival de Rock (Ja!) eso era un parque de atracciones en toda regla que mas tarde pasó a convertirse en una rave chundera. Se qué la “maravillosa” televisión española se cargó la retransmisión del concierto, con esos comentarios tan graciosísimos de dos monigotes (serán ellos los que hablan en los conciertos moviendo su flequillito?) pero peor aun fue estar allí y comprobar que entre canción y canción del gran Neil Young se oyera de fondo el bacalao pastillero que tenían puesto en la carpa electrónica. Rock and roll del “güeno”.

Poco a poco y también a grandes zancadas se le está perdiendo el respeto no solo al prójimo, sino a la música. No hay más que ver y oír un poco lo que la radio hace mal sonar (Cadena Dial necesita nuevos discos! Que los de Shakira se les repiten!) la factoría Disney edulcora el rock and roll con tres guapotes llamados The Jonas Brothers que para más inrri quieren conservar su virginidad hasta después del matrimonio. ¡Niños! El espíritu no es “sexo, drogas y rock and roll” ahora es “pajillas, pica pica y gomina”. Lamentable que las nuevas generaciones solo sepan quienes eran Nirvana porque la emo de clase lleve una camiseta y claro, que un cantante se haya suicidado “mola mazo”, en clase tiene puntos con los más malo-malotes.

Tras esto, me viene a la mente una cosa que leí hace un par de años cuando fui a ver a Bob Dylan y al día siguiente en los periódicos apareció una crónica de un periodista que empezaba mas o menos así su vivencia:

“Al concierto del genio de Duluth se acercaron una gran mezcolanza de generaciones, desde más pequeños pasando por adolescentes hasta llegando a ancianos. Me acerqué a un corrillo de chicas en edad adolescente y les pregunté si sabían quien era Bob Dylan a lo que ellas respondieron:

-Claro! No era el negro ese?
-Si, mi padre tiene discos de el, he venido obligada.”

A grandes rasgos era así, no olvidaré jamás semejantes respuestas. Vale que nadie está obligado a oír ni saber quien es Dylan, pero un poco de cultura general nunca viene mal, aunque viendo como viene el panorama, la cultura brilla por su ausencia en la chavalería y no tan chavalería. Y así entre tu y yo… los grandes artistas pecan y no sabes como.

Hace un tiempo, creo que hace tres años o más, entrevisté a Shuarma para el fanzine Orpheo, le pregunté sobre sus gustos musicales, me pareció muy curioso los artistas que escucha este hombre, que muy poco tienen que ver con lo que hace.

¿A quien destacarías actualmente en el panorama nacional?
La Mala Rodríguez me encanta

¿Has estado presenciando algún concierto últimamente?
Marisa Monte en el auditorio de Barcelona. El concierto más fantástico al que he asistido en mi vida, además después tuve el placer de conocerla y fue encantadora

Leí, que Elefantes erais fans de Camela, ¿Has tenido relación con ellos o han surgido inicios de algunas colaboraciones?
Yo era fan de Camela. Creo que es un grupo fantástico. Si que les conozco porque estábamos en la misma compañía discográfica y son una gente encantadora. Yo les hable de hacer algo juntos, pero creo que no lo veían mucho, porque no lo hemos hecho.

Aquí, un Shuarma que aún era vocalista de Elefantes, demostraba sin tapujos que le encantan grupos que se suelen repudiar, como Camela. ¿Aceptarían los grandes sibaritas de foros musicales a Camela entre sus comentarios? No soy partidario de su música, pero es muy loable de donde vienen y hasta donde han conseguido llegar, independientemente de si nos gusta su música o no.

¿Hay qué educar los oídos de la gente? Mi respuesta es claramente que SÍ. Para muchos será solo en vano pues en el país de la charanga y la música de garrafón hasta los más grandes artistas son más de lo mismo, aunque luego vayan de alternativos o de grandes figuras apoyando a la causa, unos se suben al escenario interpretando manidos set-lists coreados por su no menos repetitivos fans y mientras otros tocan entre barriles de cerveza y algún que otro futbolín. Tendremos a los ídolos legendarios, llenando estadios y polideportivos gritando y levantando el puño en contra del mainstream y de las radió fórmulas, a viva voz, sus incondicionales claman contra los 40principales, contra la televisión y Operación Triunfo, el enemigo es el periodista que debe de ir a la hoguera cual hereje en la inquisición!

Pero amigos, toca saber venderse y luego aparecer en la Mtv, subir por la escalera de la publicidad y pecar de sordo, dejarse ver por el Backstage de algún concierto de El Canto del Loco y tener que responder mil veces la misma pregunta en cada entrevista, que por más que moleste, porque la promoción es la promoción.

Es la mercadotecnia, la otra cara del músico, no tan agradable como salir a tocar, pero un trámite.

Suspiro por no enfadarme más. Pero cualquier golpe es bien absorbido por el sparring más aventajado, demostrando que canten lo que canten, digan lo que digan y desprecien lo que quieran despreciar… jamás tiraremos la toalla.!

Como en la anterior entrada, vuelvo a dejar cinco recomendaciones que espero estéis tomando nota de ellas.

Highway Companion de Tom Petty
Espera a la Primavera de Fabián
Chrome Dreams II de Neil Young
Dulces Dieciséis de Burning
Más Allá de uno Mismo de Manolo Tarancón

No tardaremos en leernos las letras…

Charly.-

Agradecimientos: a J, Álex (Vandemia) Casanova, Pili Rojas, Juan (King Size) Garrancho, Copi, Lara (el motor de mi funcionamiento) y a Manolo, por haberme hecho vivir la música tan de cerca.

domingo, 19 de octubre de 2008

Surcos, agujas y plagios.

Entre plagios y éticas morales, voy a hablar del disco, pero de verdad. Principalmente que se hable o no sobre el plagio o si Enrique se ha hecho un nuevo tatuaje no viene demasiado al caso para desgranar el disco canción a canción, menester que ya han hecho mister Juan Puchades en Efe Eme, Matías Uribe en Heraldo de Aragón y se ha hablado del disco en Radio3, El Pirata en Rock&Gol y hasta se promociona como cabecera en la publicidad de TVE.

Hellville de Luxe salió a la venta en CD, en formato digital y en vinilo con cuatro temas extra, ¿por qué? ¿marketing para vender más el vinilo que trae cuatro temas extra? ¿Será cosa de EMI? Será, será… pero las filtraciones internautas han dado el placer a cientos de fans y seguidores llegando a colocar en foros y demás esas cuatro canciones.

Mi tendencia sexual hacia una de las ediciones la voy a dejar más que clara. Se me estaba haciendo raro que este disco no fuera a salir en el viejo plástico surcado, pero para mi alegría, cual orgasmo, me sentí muy satisfecho al saber que Hellville de Luxe también saldría en este formato. Quique González ya lo hizo con Avería y Redención #7, Nacho Vegas anteriormente también lanzó un EP, Shuarma... y para los que tengan sintonizada 40latinos, Juanes también sacó su último disco de la misma manera.

Ahí tenemos al señor Elvis Costello que ha sacado su último trabajo "Momofuku" solamente en este formato, ¿por qué?, muy fácil y sencillo, intentad copiar un vinilo de forma casera, je.
Textualmente, Costello dijo esto en una entrevista en El Pais.

-“No es nostalgia. El vinilo suena mejor y llevan veintipico años engañándonos acerca de la calidad del CD. Las reediciones en ese formato de los discos originales analógicos constituyen una desgracia, al igual que la aceptación del MP3 como un estándar de sonido. La música se graba en unas condiciones de excelencia, pero luego nos conformamos con que nos la vendan en un formato que arruina todos esos meses y meses de trabajo. Éste es un problema prioritario: hay que hacer algo al respecto, cuanto antes.”

Esta forma de escuchar música tiene otro encanto que no tiene un CD, no es lo mismo venir del Corte Ingles con el Papito y abrir el plastiquito que lo cubre, abrir el jewell box o el digipack y meterlo en el portátil o en la mini cadena que venir de la añeja tienda de discos con las manos bien ocupadas llevando por ejemplo Blonde on Blonde de Dylan o aquel disco de Blind Faith que asustaría al mas pureta debido a la portada de la carpeta, la cual tienes q abrir, desempolvarlo, sacarlo de la funda de papel y limpiar un poco el disco para ponerlo en el tocadiscos, ese es el ritual preciso que divide estos dos formatos, luego está el mp3, pero eso ya es otra cosa.

Personalmente, lo prefiero así, el ritual que lo acompaña, el olor que tiene y hasta los ticks al oírlo en casa cuando lo pones en el tocadiscos.

Comprarlos no es complicado si se sabe bien donde encontrarlos, pero como he dicho antes, este resurgir viene acompañado de las grandes superficies que con acierto también venden las reediciones y nuevos lanzamientos, tal es el caso de FNAC que en sus tiendas tienen un pequeño departamento dedicado a ello, cosa que me alegra, una de las últimas veces pude encontrar Grace de Jeff Buckley. Pero hay tiendas repartidas y escondidas en este país, donde tomarte una tarde libre para llenarte los dedos de polvo buscando ese single que llevas tiempo buscando o ese LP que una vez perdiste.

En Madrid tenemos varias tiendas, hablaré de las que conozco como;


-La Metralleta, tienda subterránea en la Plaza de las Descalzas s/n la cual tiene tres apartados, uno llamémosle “general”, donde tienen todo lo relacionado con el rock and roll tanto internacional como nacional, singles, heavy, blues, jazz, country. Una de las peculiaridades de esta zona es que mientras buscas algún disco, te sazonan la búsqueda con bachata, salsa y merengue, Luego tienen su zona de música clásica y otra con los discos de 2, 3 y 4€, que si buscas bien te puedes llevar un chollo a casa.

-Discos Babel, una de mis preferidas, el dueño es un tipo muy majete, tienen los discos por apartados y encantado te ayuda a encontrar lo que buscas, a parte que también te piden algún disco por si no lo encuentras. Decorada con pósters de The Beatles, Iron Maiden y picture disc junto con demás vinilos difíciles de conseguir. Muy recomendada.

-Citadel Records, una tienda que les sonará a aquellos que buscábamos vinilos de Héroes del Silencio hace mucho tiempo, tienda decorada con rarezas muy complicadas de conseguir. Tienen una bonita variedad de cd’s, muchísimos singles y como no, vinilos.

-Discos Bangladesh, otra de las tiendas bandera del coleccionismo heroinómano, sus dueños tienen tras el mostrador fanzines, discos de Las Novias, miles de rarezas tanto de HdS como de Bunbury y a parte, música y rock and roll en general. Junto con Discos Babel y Citadel, estas tres tiendas están todas en Costanilla de los Ángeles. Juan y Eva Amaral, creo recordar, han hablado de esta tienda en alguna que otra entrevista, es más, dentro de la Web de la tienda se puede encontrar ese artículo.

-Rock and Roll Circus, dedicada al vinilo de importación y reediciones. Tienda algo fría y suele estar bastante desértica, vamos que no hay nadie. Te traen los discos que pidas, el dueño te aconseja y te da conversación nada mas entrar. Pero eso de llamar al timbre antes de entrar… ya corta.


-Escridiscos, Una tienda con un ambiente muy familiar, dedicados al vinilo de importación difíciles de conseguir centrándose en el Power Pop.
José Escribano, el dueño de la tienda, dijo todo en muy pocas líneas en una entrevista a CincoDias.com diciendo 'Seguiré vendiendo rock aunque me den un pastón'. La puedes encontrar en la C/Navas de Tolosa, 4.

-La Gramola, en la calle San Martín, cerca de la FNAC de Callao, no será difícil de encontrar, pues su fachada amarilla se deja ver bien. Una tienda muy rica en LPs, DVD, CD’s, Cassetes y Vhs. Algo pequeña, pero muy grande en riqueza y variedad.


-Melocotón, en la Calle Salud, a poco de donde estaba el ya fusilado Madrid Rock. Una tienda bastante respetada por los compradores, tienen un catálogo muy vistoso que haría babear al fetichista más experimentado.


Me dejo otras tiendas, pero estas son las que tengo por visita obligada cada vez que voy por el centro, próximamente hablaré de otras tiendas de fuera de Madrid a las que he podido ir, como Mala Música en Jerez, Ámsterdam en Valencia o la ristra de tiendas en la Calle Tallers de Barcelona.


Volviendo al tema de este fetichismo musical, mientras preparaba esta sección necesitaba hablar y entrevistar a alguien que supiera de música, que haya visto el mercado y todos sus cambios durante toda su vida y que encima fuera un músico respetado. Cómo Dylan tenía la agenda completa y me pillaba un poco mal… entrevisté a otro grande, el señor Litto Nebbia.


En estos tiempos de hoy en dia en los que los sistemas analógicos han quedado un poco de lado y se han impuesto nuevas tecnologías… que prefiere, el vinilo, el CD o en último lugar, el mp3?

-Bueno, para mi el hecho artístico es el vinilo, desgraciadamente por cuestiones de negocios en todo el mundo han desmantelado las fábricas, es un lío. Pero ahora hay algunas pequeñas reediciones, yo tengo inclusive dos o tres discos ahora editados en Estados Unidos y acá en Europa, sobre mis primeros discos en los comienzos de mi carrera, de mi mundo, son pequeñas tiradas para coleccionistas, este… yo creo que se va a remontar de nuevo, pero no va a cambiar todo, por que el CD está también metido en este mundo y tiene una razón práctica de ser.


Pero creo que el vinilo, a pesar de se le dio un poco de lado, no se fue nunca porque ahora empiezan a fabricarse de nuevo y hay gente coleccionista y que les gusta la música, desde luego lo seguirán comprando.


Tiene otro encanto, claro, un arte más cuidado en las portadas, y algunos sonidos incluso suenan mejor en el vinilo, como los bajos, sonidos graves…
Yo tengo en mi casa cerca de nueve mil vinilos, de las mejores épocas, tengo… de Jimi Hendrix, Traffic, Dylan… todos esos los tengo en vinilo y no se olvidan nunca. Siempre los oirás en vinilo.

Tras leer la entrevista que me concedió Litto Nebbia, analicemos el panorama que nos comenta.

Allá a finales de los 80’s las grandes compañías discográficas nos vendieron el nuevo formato como algo revolucionario, mas resistente que el vinilo y con mayor duración. Pero no, como antes he mencionado, el arte o diseños de portadas en CD pierde mucho, a parte este formato era más barato de fabricar pero costaban más. Pretendían que todos esos discos de décadas anteriores se volvieran a vender en CD, y de paso, como quien no quiere la cosa, también se venderían millones de reproductores para esos pequeños artículos redondos.

¿O acaso no es Sony una compañía de discos y te vende sus mini cadenas y además discos vírgenes? Y claro, esos discos vírgenes en alianza con Internet hará que no se vendan los discos suficientes para que la maquinaria de la mentira continúe para desgracia de muchos y alegría de otros, el vinilo volverá con más fuerza que nunca.

Aunque os cueste rascaros el sueldo y tengáis que compraros un tocadiscos, no están tan caros y los hay muy majos.


Para ir cerrando… Neil Young en una entrevista publicada en ElPais dijo lo siguiente:


"El CD fue un desastre pero todo empeoró con el MP3. Es una tragedia que la gente escuche música en los ordenadores o en esos aparatitos. No dan sonido real, son como esos juguetes de plástico que venden en los supermercados. Hemos dejado que las empresas informáticas definan lo que es un buen sonido y han demostrado que no tienen ni idea de alta fidelidad. Hacen máquinas muy bonitas pero suenan a mierda. ¿Sabes una cosa? Estuve en casa de Steve Jobs, el jefe de Apple. Y en su salón tenía elepés y un giradiscos".


Solo el lo podría decir así.


Antes de despedirme, recomendaré algún disco que otro, lo haré en cada nueva entrega de esta sección recién estrenada, así descubriremos otros tipos de música fuera del círculo Bunbury/HdS, pero también aprenderemos a valorar lo que cuesta hacer que te oigan. Mis cinco discos recomendados de este mes:

- So Far de Bob Theil
- Mescalito de Ryan Bingham
- Back To Me de Kathleen Edwards

- Seasons de Jonny Kaplan
- El Espectador de Julio de la Rosa

Nos veremos en el siguiente disco.


Charly.-

Agradecimientos: peQueÑo Drugo, Alex Casanova, Manolo Tarancón y a Lara por dejarme su portátil para empezar este mejunje de letras.